En la filosofía china, esto está a la orden del día, y se representa mediante la teoría de Las Cinco Fases: un ciclo donde cada fase genera la siguiente, y todo el universo (y la naturaleza) queda organizado dentro de él.
Podemos decir que los protagonistas de cada fase son los 5 Elementos, encontramos Fuego que genera Tierra, que genera Metal, seguido por Agua, Madera, y Fuego nuevamente cerrando este ciclo. Pero como he dicho toda la naturaleza está organizada dentro, y las estaciones del año son un ejemplo.
El otoño corresponde al elemento Tierra. La Tierra nos provee el alimento, nos da sustento y estabilidad. Se considera “la madre” que produce, transforma, y entrega sus frutos para nutrir.
En la naturaleza, la energía se empieza a replegar, se dirige hacia dentro: pues los días se acortan y empieza a refrescar. En el ser humano representan el Bazo y el Estómago, por ser los órganos principales en la producción de sangre y energía.
Y para que nuestro organismo esté en harmonía lo mejor es seguir los movimientos de la naturaleza. Además, tenemos un factor muy importante con el que podemos ayudar y preparar a nuestro cuerpo: la alimentación.
Para que Bazo y Estómago funcionen sin complicaciones, en esta época se recomiendan los alimentos de naturaleza neutra (ni fríos como el yogur, ni calientes como se clasificaría la cebolla). Deben ser templados, tomados tras cocciones a fuego medio como al vapor u hervido, en especial los cereales.
La alimentación ideal para el otoño
Os dejo una lista por si os interesa conocer la alimentación ideal para el Otoño:
- Cereales: mijo, maíz, arroz, avena
- Legumbres: garbanzos, judías blancas, soja amarilla
- Vegetales: en especial aquellos amarillos – naranjas y redondos como la calabaza, la patata, la zanahoria o el boniato
- Huevos
- Carne magra
- Frutas como la manzana y la granada
Y como curiosidad, os presento también al mayor enemigo del Bazo: el Azúcar, que con su sabor dulce concentrado y su naturaleza fría lo debilita y favorece la condición ácida del organismo. Debemos buscar alternativas si queremos endulzar nuestros platos, un magnífico ejemplo, la miel.